Enrique Castillo-Pesado

Ficción financiera

Enrique Castillo-Pesado

13 Oct, 2012

Rescate incierto de España; ¿ajustes de la Casa del Rey?; 50 millones de euros por ¡casarse!; y Boeing

El presupuesto 2013 del gobierno español marca las casillas adecuadas. Abre la puerta a un rescate esperado desde hace mucho en la zona euro. Pero el camino que España tiene por delante no será fácil y más cuando Cataluña desea ¿independizarse? El presupuesto publicado hace unos días, unido a un paquete de reformas, tiene como objetivo mostrar que la Madre Patria está haciendo todo lo que debe, y puede optar a la ayuda financiera sin condiciones adicionales impuestas a posteriori por sus aspirantes a ¿salvadores? Incluye otros 13 mil millones de euros de recortes de gasto y subidas de impuestos y la promesa de acelerar las reformas durante los próximos meses. Olli Rehn, comisario europeo de Asuntos Económicos, incluso realizó un viaje a España “para bendecir el paquete”.

El presupuesto se basa en suposiciones económicas optimistas. Es probable que la contracción económica del año que viene sea peor de lo previsto. Barclays Capital espera una contracción del PIB de 1.8% en 2013, frente a la previsión del gobierno de 0.5%. Las tensiones con las comunidades autónomas, especialmente con Cataluña, harán que al gobierno central le resulte difícil aplicar las medidas de austeridad, incluso podrían desencadenar una auténtica crisis política. Normalmente, los mercados podrían retroceder ante un panorama económico tan sombrío, pero la perspectiva de una compra de bonos por parte del BCE ha calmado su agitación.

España tiene poco que ganar

Con el interés de los bonos a diez años situado todavía en un incómodo 6%, España tiene poco que ganar con un aplazamiento del rescate. Puede que el presidente Mariano Rajoy espere hasta las elecciones autonómicas del presente mes, tras las cuales los mercados le obligarán a actuar. Se están sentando las bases para un experimento político y económico histórico. El rescate de la cuarta economía más grande de la zona euro pondrá a prueba la unidad política de la zona y será el primer caso práctico del plan de compra de bonos de Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo. Puede que algunos actores clave se vuelvan más flexibles. Los recientes comentarios del ministro de Finanzas de Alemania (donde acabo de estar) indican que Berlín es reacio a aprobar un rescate soberano español tan poco tiempo después del rescate bancario del país. Finalmente, el BCE comprará bonos con convicción y de manera continua. Eso, a su vez, depende de que España ponga en práctica su plan de buena fe. Existe la posibilidad de que se genere un círculo virtuoso y la bajada de los intereses soberanos reduzca el costo de los préstamos de la economía española. Pero teniendo en cuenta el elevado paro (casi 6.5 millones de personas), la implacable austeridad y la tensión política, el viaje será incierto. Y no es culpa de Rajoy, sino de la situación económica global y de los anteriores gobiernos españoles. Pero siempre habrá un chivo expiatorio, ¿o no?

Tratan con cortesía al rey de España

El gobierno trata con cortesía al rey Juan Carlos de Borbón y su entorno en las cuentas generales del Estado de 2013. La Casa del rey sólo verá recortado su presupuesto 4%, hasta los 7.93 millones de euros. El ajuste es el doble que el que se aplicó para 2012, que fue de 2%, pero muy inferior a la media del aplicado a los ministerios (-8.9%), y mucho menos aún que el tijeretazo a los órganos constitucionales del Estado, capítulo donde está encuadrada la Casa del rey.

Tras el escándalo protagonizado por su yerno, Iñaki Urdangarín, la Casa Real anunció el pasado julio que el rey había decidido rebajar 7.1% su sueldo bruto anual y el del príncipe de Asturias, hasta los 271 mil 841 y los 135 mil 920 euros, respectivamente. El rey pidió recortar también en 7.1% la cantidad anual asignada (315 mil euros) para gastos de representación del resto de los miembros de la Familia Real (la reina, la princesa de Asturias y las infantas Elena y Cristina).

¿Alguien ganará el corazón de una hija lesbiana?

El magnate del sector inmobiliario de Hong Kong, Cecil Chao, ha ofrecido 50.1 millones de euros ¡al hombre que logre ganarse el corazón de su hija lesbiana y casarse con ella! Chao ha realizado la oferta después de que varios medios de comunicación aseguraran que su hija, Gigi Chao, se casó esta primavera en Francia con su novia de hace siete años, Sean Eav, según informó el diario de la colonia británica South China Morning Post. El millonario, sin embargo, negó que sea cierto que Gigi, de 33 años, se haya matrimoniado y calificó de “falsas” las noticias.

El matrimonio entre personas del mismo sexo no es legal en Francia, pero según algunas informaciones, la pareja celebró la ceremonia en una iglesia. “No me importa que sea rico o pobre. Lo importante es que sea generoso y de buen corazón”, aseguró, Cecil Chao, de 76 años, sobre el posible pretendiente ¡mexicano! “Gigi es una mujer muy buena, con talento y parecido. Es leal a sus padres, generosa y realiza trabajo de voluntariado”, añadió el célebre magnate, que aseguró –en una ocasión en un versus televisivo– que había tenido relaciones íntimas con diez mil mujeres de diferentes nacionalidades. Entonces, ¿le ganó a Salomón, Casanova y a Porfirio Rubirosa? ¿Qué piensa usted de cómo se mueve la economía o la ficción financiera? Esta noticia de Gigi Chao es real, ya que esta mujer que se licenció en arquitectura en la Universidad de Manchester (Reino Unido), y es una directiva en la empresa de su padre (Check Nang Holdings), se ha tomado con humor la iniciativa para buscarle la media naranja masculina. Ha dicho que es “bastante divertida” y que no se preocupará hasta que haya sido encontrado un verdadero pretendiente (algunos críticos aseguran que ¡es un mexicano!). “Mi padre tienen una imagen especial sobre mí. A veces, la gente rechaza aceptar las cosas como son. Dejemos que el tiempo pase”, confesó.

Sanciones por nueve mil 300 millones de euros a Estados Unidos por ayudas a Boeing

La Unión Europea (UE) pidió a la Organización Mundial de Comercio una autorización para imponer sanciones comerciales de hasta 12 mil millones de dólares anuales (unos nueve mil 300 millones de euros) a Estados Unidos por el caso Boeing. La UE dirigió esta petición al Órgano de Solución de Disputas (OSD) de la OMC tras concluir que Washington incumplió la exigencia del organismo internacional de retirar determinadas ayudas públicas a la empresa aeronáutica estadunidense Boeing.

La Comisión Europea también alertó que el sector de la aviación europea está perdiendo peso en la esfera internacional por la “intensa competencia” de otros países y por el “escaso crecimiento” de esta industria dentro de la UE. Así, ha apostado por impulsar acuerdos con socios como Rusia, China y Egipto para generar, según estima Bruselas, 12 mil millones de euros al año. “Necesitamos con urgencia emprender una transformación radical. Frente a la mutación de la aviación mundial (las mejores líneas: Qatar Airlines y Singapur Airlines; otras, KLM, Air France, Lufthansa, Lan, Japan Airlines y British Airways, pero en otro nivel; y de México, Interjet, Aeroméxico y Volaris), Europa debe reaccionar y adaptarse rápidamente, a riesgo de quedarse a la zaga”, indicó Siim Kallas, vicepresidente del Ejecutivo comunitario y responsable de Transportes. Este personaje presentó en Bruselas una propuesta para revisar la estrategia europea en el sector de la aviación –que abarca desde las aerolíneas hasta aeropuertos y la gestión de tráfico aéreo–, con ideas como impulsar nuevos acuerdos con países vecinos y socios emergentes, proteger la ¿justa competencia? y potenciar las inversiones, eliminando restricciones en materia de propiedad y control.

Por último, Bruselas considera necesario potenciar y concluir nuevos acuerdos con terceros países para “favorecer la entrada” de la industria europea en nuevos mercados. En concreto: apuesta por cerrar acuerdos aéreos a escala comunitaria con socios clave cuyo peso en la aviación “va en ascenso” como Rusia, China, India, Japón, los Estados del Golfo y con los países del sudeste asiático. También pide que se negocien convenios antes de que llegue 2015 entre la UE y países vecinos.

Un comentario al renglón: en mi último viaje a Alemania, tuve que viajar en business class en British Airways. ¡No se lo recomiendo! Parece que uno entra en un laberinto. ¡Hasta los (las) sobrecargos sufren para servir las viandas y atender como se debe a los pasajeros. Otro punto: los asientos para dormir, parece que fueron hechos para personas de escasa estatura. Y los que se sientan en medio sufren para salir o ir al baño. Espero que no haya sido Philippe Starck el diseñador. ¡Inténtenlo y verá! Y hasta la próxima, ¡abur!