El comercio informal en Mextrópoli

Ciudad de México.- Como parte de la oferta de ponencias y mesas redondas dentro de Mextrópoli, tuvimos la oportunidad de asistir al foro Ágora Móvil, Ocupa Ciudad: ¿A favor o en contra del comercio informal?

En primer lugar, el comercio fue definido como la distribución de mercancías. Que para el caso de México, el comercio en la vía pública es una situación histórica que se remonta hasta los orígenes prehispánicos.

Sin embargo, se reconoce como una problemática, en el momento en el que hay una disputa por el espacio público. El comercio informal, es un medio de supervivencia para más de medio millón de personas. Comercio que ha crecido exponencialmente durante los últimos 15 años.

Resalta que los hogares son una de las unidades económicas más abundantes, ya que dentro de ellos se elaboran alimentos para la venta en la vía pública. Además, por lo regular, las personas compran a los vendedores ambulantes no por la calidad, sino por el precio.

En lo referente a los ingresos, entre el 75 y 80% de los comerciantes ganan hasta tres salarios mínimos. En promedio, un vendedor ambulante ingresa 300 pesos diarios. Aunque, cabe apuntar que este tipo de empleo no genera ningún tipo de prestación social.

El comercio ambulante es un tema que involucra varias disciplinas y que es necesario atacar desde varios frentes. Por ejemplo, la educación, el 50% de los jóvenes que dejan la escuela a nivel secundaria o bachillerato no encuentra una oportunidad laboral formal que tenga un buen ingreso.

Casos como el cierre del Bordo Poniente, deja a cerca de 1500 familias sin trabajo. Ésta y otras causas son el origen del incremento de personas que se dedican al comercio en vía pública. Actualmente, de cada 10 empleos que se generan, 6.7 pertenecen a la informalidad. El crimen organizado también genera empleos de este tipo, se estima que a los llamados “halcones”, se les paga 400 dólares mensuales.

Una de las tendencias que hace frente al comercio ambulante es el comercio electrónico, de inicio presenta dos retos: el primero, falta muy poco para que la informalidad incorpore los cobros por medio de tarjeta de crédito y débito, por lo cual están a un paso de la bancarización. El segundo, se debe encontrar la solución para que la informalidad se incorpore al comercio electrónico, ya que si no se actualiza, corre el riesgo de rezagarse.

La fuerza laboral en la informalidad sólo se dedica a ser comerciante, sin generar algún producto de valor. Hasta estos años, el sistema de compra de mercancías adquiere productos importados de manera mayorista. Por lo que es necesario impulsar la fabricación de productos dentro del país para detener las importaciones.

El panel de discusión estuvo integrado por la Dra. en Sociología y Economía, Berenice Martínez, el Lic. en Economía Horacio Robles, el Arq. Jesús López, y la Dra. Moreno Toscano, Historiadora.