David Páramo

Análisis superior

David Páramo

26 Nov, 2014

Sigue la ventaja

Con todas las debilidades que pueda tener desde el punto de vista teórico el crear la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México (que se ajustará hasta la inflación máxima establecida por el INEGI) se trata de un paso fundamental en el sentido correcto: desvincular al salario mínimo fijado por la Conasami de su carácter de unidad de cuenta.

El primero de mayo, cuando Miguel Ángel Mancera inició este debate, era claro que tenía razón en dos puntos: que el salario mínimo no cumple con los principios fijados en la Constitución y que su principal ancla es su carácter de unidad de cuenta.

De acuerdo con la comisión que preside Basilio González más de 60% de las leyes federales y locales contemplan al salario mínimo como unidad de cuenta para multas, actualizaciones e incluso para el pago de créditos hipotecarios por el Infonavit.

Una discusión que se antojaba interesante desde el punto de vista económico y se contaminó por la irresponsable intervención populista del PAN, que trató de convertirlo en una consulta pública en la cual el lamentable Gustavo Madero pretendía aumentar el salario mínimo por decreto, por un acto de voluntarismo político como lo hacen populistas como Cristina Fernández o Nicolás Maduro en dos de las economías más rupestres de América Latina.

Esto generó resistencias al debate dentro del gobierno federal. Alfonso Navarrete Prida creó una capa de protección al lograr que las dos principales agrupaciones sindicales, patrones y el propio gobierno se opusieran a un incremento por decreto (acto de voluntarismo político, por aquello de la semántica) y estableció que el tema se analizaría a mediados del año próximo, luego de que se perdiera el impacto electoral.

Así, la administración de Mancera siguió adelante con su intención que ayer se convirtió en ley con la aprobación de la Asamblea de Representantes del Distrito Federal de sus dos iniciativas.

La primera de ellas fue crear la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México que arrancará con el mismo nivel del salario mínimo y se actualizará con la inflación establecida por el INEGI. Para llegar a este punto se requiere el cambio de por lo menos 180 leyes que se aplican en la Ciudad de México.

La segunda autorización que recibió por los legisladores capitalinos es que se utilice esta unidad de cuenta para multas y actualizaciones.

Para la administración de Mancera, el trabajo está prácticamente concluido.

Gobierno

Sin embargo, habrá que ver cuál será la reacción del gobierno federal o de algunas otras localidades ante este anuncio.

Es un hecho que en otras experiencias internacionales el desvincular al salario mínimo de su carácter de unidad de cuenta ha permitido que se incremente de una manera espectacular. Se toma, erróneamente, el ejemplo de Uruguay, pero no vale puesto que ese país apenas tiene economía.

La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos ha establecido en diferentes ocasiones que una de las anclas que tienen para incrementar los salarios mínimos es precisamente el impacto que tendría en otros sectores de la economía como bien pueden ser los créditos del Infonavit o el monto de financiamiento a los partidos políticos.

El establecimiento del salario mínimo para 2015 no será diferente a lo que ha ocurrido en los mismos años, puesto que se trata de una determinación de carácter técnico y por más que haya presiones políticas por la comparación no existe ningún elemento económico para modificar lo que ha sido tradición.

Cumplidor

Los tres años que Tristán Canales Nájar encabezó la Cámara Nacional de Industria de Radio y Televisión son, quizá, lo más complicados que se vivieron en el sector. A este hombre le tocó mantener la unidad gremial en los tiempos en los que se dio la reforma constitucional a las telecomunicaciones y sus leyes secundarias que, como hemos señalado en esta columna, son lo más importante que ha pasado en el sector desde la privatización de Teléfonos de México a principios de la década de los noventa.

Canales logró que la voz y los diferentes agremiados a la CIRT fuera escuchada en un ambiente de equidad, comprendiendo que se trata de intereses diversos.

Uno de los más grandes talentos del presidente de la CIRT ha sido tener un diálogo respetuoso y firme con el gobierno para mejorar las condiciones de los agremiados.

Para Canales ha llegado el momento de dejar la presidencia del gremio, ahora le corresponderá a alguien proveniente de la industria de la radio (claro, si no hay sorpresas de último minuto), quien seguramente tendrá unos zapatos muy grandes por llenar.

Vuelos

Aeromar, encabezado por Fernando Flores, sigue ampliando su operación en México. A partir del primero de diciembre iniciarán con la operación de una ruta entre Puebla-Guadalajara-Veracruz que será operada con aviones de tipo ATR. Estiman que tendrán un particular éxito entre viajeros de negocios, aun cuando esperan ofrecer una buena alternativa para los turistas.

Desesperados

Quienes tomaron la decisión equivocada de invertir en Ficrea están estableciendo una presión hasta cierto punto normal hacia las autoridades. Exigen que se les entregue su dinero y que la Sociedad Financiera Popular vuelva a operar como antes de la intervención.

No comprenden, tristemente, que lo más probable es que el dinero que depositaron simple y sencillamente no esté. Que la administración de Ficrea utilizó una empresa pantalla para dar financiamientos que, hasta donde se sabe, no tienen ninguna clase de respaldo. Se habrían dado a empresas sin solvencia financiera o inexistentes.

Los administradores de Ficrea habrían usado su empresa como parapeto para operaciones irregulares o abiertamente ilegales, lo cual no se resuelve regresando a operar.

Los defraudados por Ficrea utilizan un argumento que puede sonar bastante bueno cuando dicen que confiaron su dinero en la capacidad de regulación de las autoridades. Sin embargo, se trata de una verdad a medias.

La ley establece que sólo están protegidos los depósitos hasta por 25 mil Udis, unos 130 mil pesos, así que si ellos llevaron los recursos lo hicieron a sabiendas del riesgo potencial que corrían.

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores ni ninguna otra autoridad pueden garantizar la probidad de todos los participantes, sí deben tomar acciones rápidas ante dudas como lo hizo el equipo encabezado por Jaime González Aguadé.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube