CIUDAD DE MÉXICO.- Hace 70 años se inventó en Estados Unidos el parquímetro, un aparato que cobraba a los autos por estacionarse. Con el paso de los años el aparato ha evolucionado, primero de un tubo de metal que servía a un lugar a uno digital que sirve a toda una calle. Pero en plena revolución digital, un sistema físico de cobro de estacionamiento ya no tiene sentido. Esto llevó a Carlos Anaya a crear Parkimóvil.
En entrevista con Rodrigo Pacheco en Imagen Empresarial, el fundador de esta empresa explica que el objetivo principal del servicio es prescindir de los aparatos que ensucian el paisaje urbano para usar los celulares.
Al estacionarse, el usuario sólo se debe fijar el número asignado al cajón donde quedó su auto y pagar a través de uno de tres métodos:
- Con un SMS, el cual hace el cobro directo del saldo de la línea sin importar la compañía telefónica
- A través de la aplicación, vinculada a una tarjeta de crédito, débito o prepaga
- O mediante el pago en un negocio cercano
Esto elimina varios problemas para ciudadanos y autoridades al eliminar el manejo de efectivo. Así, una persona que no cuenta con monedas puede pagar y la autoridad no tiene que recolectar todas las monedas en la ciudad.
Otros beneficios
Además de la sencillez del servicio, tiene otros beneficios. Anaya explicó que por el simple hecho de usar Parkimóvil, el usuario cuenta con un seguro que cubre el robo del vehículo o actos delictivos como cristalazos.
Por si esto fuera poco, el costo de la hora es de sólo 2.50 pesos contra los 8 que se cobran el Distrito Federal. Pese a esto, el gobierno recibe los mismos ingresos al eliminar intermediarios que deben cubrir el costo de operación de los parquímetros.
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