IVA, ¿la solución?

Ya comenzó a hablarse de posibles incrementos a impuestos especiales o esquemas para seguir con la recaudación fiscal, de frente a una situación económica interna que no termina de reactivar, y un precio del petróleo que está casi a la mitad de lo esperado.

De ahí la cuestión, si la solución es el IVA. La Reforma Fiscal de 2015 descarta la aplicación del IVA en rubros como alimentos y medicinas, pero, ¿es la solución a los problemas y ello permitirá apoyar a la población más necesitada?

Con no aplicar el IVA a medicinas y alimentos no se soluciona que las personas puedan acceder a medicamentos más baratos y que tengan posibilidad de una alimentación más sana, o qué las familias que enfrentan el padecimiento crónico de un integrante no se vayan a la quiebra, o más aún, que siempre haya un mejor abasto de alimentos.

La población de menores recursos se supone que están sujetos a esquemas en los que la Secretaría de Salud, al mando de Mercedes Juan López, los apoya con medicina, o con algún programa de salud pública.

Y ni qué decir de lo qué a alimentación se refiere. La realidad es distinta en muchos casos y estados de la república.

Más allá de la aplicación o no de un gravamen en alimentos o medicinas debería impulsarse una reestructuración en el sistema de salud pública, para que hospitales, laboratorios e incluso trabajadores entren a un esquema que pueda soportar dicha alternativa sin recaer en uno más complejo que el actual.

Esquemas que permitan a la clase media no desaparecer aunado a esquemas de apoyo en el que la alimentación sea más accesible para las personas que más lo necesitan, tal cual sucede en varios países, donde el apoyo vía vales, o restaurantes especiales les permite tener acceso a una mejor y más económica alimentación.

Y no gravar y gravar alimentos que hoy por hoy están en la dieta del mexicano, argumentando que con ello se combate la obesidad. Hay quien asegura que hasta la fruta en exceso es dañina.

De ahí que la no aplicación de un IVA generalizado dejará las cosas similares o iguales, es decir, con el 60 por ciento de la población, que vive en una economía subterránea, fuera del pago de impuestos.

Y el contribuyente cautivo pagando más impuestos.

FARMACÉUTICAS ALZAN LA VOZ

La semana del 23 de julio se darán cita las grandes cadenas de farmacias como del Ahorro, Benavides, Guadalajara, San Pablo, Walmart y FEMSA en la Convención anual de la Asociación Nacional de Distribuidores de Medicinas (Anadim), presidida por
Gabriel Zavala.

Este evento promete ser interesante ya que reunirá a competidores que hoy están buscando tomar el liderazgo en la venta minorista de productos farmacéuticos, como FRAGUA (Farmacias Guadalajara), de Carlos Ordoñez, que busca ser la cadena líder en México a través de la apertura continua de nuevas farmacias.

O por su parte, FEMSA (Farmacias YZA) que se ha ido expandiendo a través de la adquisición de cadenas de farmacias regionales como Farmacón y la Moderna, aunque esto todavía se encuentra en proceso de aprobación por parte de la Cofece, de Alejandra Palacios, la cual está muy atenta a la fuerte concentración que está teniendo la venta de productos farmacéuticos.