Nueva NOM para bebidas alcohólicas

Le cuento que una de las tareas que se ha propuesto la Secretaría de Economía, que encabeza Ildefonso Guajardo, con el Consejo Coordinador Empresarial, que preside Gerardo Gutiérrez Candiani, es la revisión del proceso de elaboración de normas mexicanas y normas oficiales, pues si hay un tema que preocupa es que para ponerse de acuerdo entre los diferentes actores de una industria, pueden pasar años por el periodo que toma el acomodar los procesos de producción, para garantizar el cumplimiento.

De hecho, la subsecretaria de Competitividad y Normatividad, Rocío Ruiz, considera que este mismo trimestre comenzará la revisión de los procesos, para hacerlos eficientes y ágiles. Eso sería buena noticia.

En este sentido, justo la subsecretaria Ruiz, a través de la Dirección General de Normas, que dirige Alberto Esteban Marina, ha iniciado una serie de importantes reuniones con la industria alcoholera, la del tequila y la del vino, para integrar una norma general que establezca la Denominación, Especificaciones Físico Químicas y demás información comercial con la que deban cumplir las bebidas alcohólicas en general (espirituosas y medio espirituosas).

La intención es que la norma permita etiquetados que informen con toda veracidad al consumidor de las características de la bebida, con la finalidad de protegerlo de publicidad engañosa, además de garantizar la protección a la salud por el contenido de alcohol de las bebidas que se ofrecen al público.

Los que saben consideran que esta norma vendrá a ser la más importante para la industria de bebidas alcohólicas, por lo que existe gran inquietud e interés de este sector por lo que se presente y se negocie.

De hecho, se ha integrado un grupo de cerca de 30 expertos que representan a cada una de las diferentes categorías, como bebidas alcohólicas fermentadas, destiladas, licores, cocteles y bebidas alcohólicas preparadas.

Resaltan empresas como Bacardí, Cuervo, de Juan Beckman, y Diaego, el Consejo Regulador del Tequila, Pernod Ricard, Heineken, el Consejo de la Industria de Vinos y Licores, la Asociación de Importadores de Bebidas Alcohólicas, el Consejo Regulador del Mezcal, entre los más importantes.

Por lo pronto, se están llevando a cabo reuniones semanales en las oficinas de Esteban Marina, para alcanzar acuerdos que permitan integrar esta norma “paraguas” antes de que concluya el año, paso previo a la consulta pública que, por ley, se tiene que realizar a través de la publicación de la misma en el Diario Oficial de la Federación.

DE FONDOS A FONDO

Hoy el Consejo Coordinador Empresarial, que preside Gerardo Gutiérrez Candiani, publica un desplegado que elaboró en coordinación con algunas organizaciones de la sociedad civil en materia educativa (Mexicanos Primero, que encabeza Claudio X. González, es la más destacada) y la Comisión de Educación del CCE, con el objeto de conformar un “Frente Común por la Educación en Oaxaca” y respaldar la medida de los gobiernos estatal y federal. Es razonable el respaldo luego de que el CCE fue el más aguerrido crítico cuando un día antes de las elecciones intermedias, el secretario de Educación pospuso la fecha de exámenes, pero lo que resultó “innecesario” para algunos de los convocados, es que se diga que el frente sea de respaldo al gobierno federal, y al mismo tiempo se “pida firmeza” para sostener la decisión, cuando la demostración es indudable. ¿Usted qué opina?

Al gobernador de Aguascalientes, Carlos Lozano de la Torre, tan aficionado al beisbol, le aventaron una bola rápida que parece que dejó pasar aunque tiene que ver con el agua.

Le cuento: el Congreso de Aguascalientes, que como casi en todo el país está políticamente sintonizado con la administración local, aprobó una reforma a la Ley de Aguas del estado, en la que –so pretexto de proteger el derecho humano al agua– obliga a dotarla a los usuarios, paguen o no por el servicio.

Sobra decir que esta legislación contraviene toda cultura de cuidado del agua, premia la morosidad y pone en riesgo las finanzas de los organismos operadores y con ello, los programas de subsidios focalizados.

Es paradójico que esto haya ocurrido en Aguascalientes, cuando PricewaterhouseCoopers cataloga a la entidad como la número uno en acceso al agua potable, y el manejo de este tema, haya permitido el exponencial desarrollo de la industria en los últimos 20 años.

Como le digo, es verdaderamente inexplicable, de no ser por la ocurrencia política de los diputados locales. Le adelanto que la Concesionaria de Aguas de Aguascalientes que administra Veolia, ya se amparó contra esta Ley de Aguas y evidentemente, lleva las de ganar en el plano jurídico. El amparo quedó radicado bajo el expediente 1825/2015.

Sin embargo, la óptica electoral y populista con la que se trató este asunto en el legislativo local, no deja de ser una mala señal para la inversión privada. Ahora sí que ¡aguas, gobernador Lozano!