Luis Enrique Mercado

Perspectivas

Luis Enrique Mercado

29 Jun, 2020

Caída mayor a 10% sin recuperación rápida

La economía mundial está colapsada. Todos los países están en la peor recesión de la época moderna y el comercio está, cuando mucho, a la mitad de donde estaba el año pasado. Industrias como el turismo y la aviación se destruyeron y nadie adivina cómo ni cuándo iniciará su recuperación.

De lo que sí todo el mundo está seguro, es que la caída de la economía mundial no llegará, en promedio, al cinco por ciento y que la recuperación podría ser en V. Es decir, hasta 2021 se regresará a cifras positivas.

Pero también hay certezas en el caso de algunas tragedias. La peor parece ser la de México, donde el pronóstico del Fondo Monetario Internacional ya ubica la caída en -10.5%, una tasa que pronosticamos en este mismo espacio en marzo pasado.

El problema no sólo será una caída nunca vista en la economía mexicana desde que se hacen mediciones del Producto Interno Bruto (PIB), sino si será posible una recuperación similar a la de la economía mundial, es decir, en V.

La realidad es que el retroceso será de más de 10.5% y lo más probable es que andemos con un desplome de entre 13.0 y 15.0% este año y que la recuperación sea en L, es decir, con una caída vertical en los niveles de actividad económica y luego un estancamiento en el fondo, sin crecimiento cuando menos en 2021.

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Todos los gobiernos del mundo, desarrollados y en desarrollo, han programado medidas contracíclicas con políticas fiscales para aumentar el gasto público, proteger la vida de las empresas y el empleo, así como alentar la inversión privada mediante políticas monetarias con inyecciones de dinero en el sistema financiero y tasas de interés al cero por ciento.

Hasta ahora, la estrategia del gobierno mexicano ha rechazado el uso de medidas contracíclíclicas, al contrario, apretó el gasto y la inversión públicos, determinó contraer 75 por ciento el gasto operativo del gobierno y no otorgar ningún apoyo a las empresas.

El propio Primer Mandatario ha dicho que su estrategia es totalmente diferente. Inyectará dinero vía sus programas sociales con lo cual considera que empujará la demanda de bienes y servicios y, con ello, las empresas saldrán adelante.

Nadie cree que esa estrategia sea la adecuada y hay muchas coincidencias en cómo la forma en la que se está manejando la crisis económica profundizará los daños hechos por la pandemia del covid-19.

La única institución del gobierno mexicano que va en sentido contrario es el Banco de México, el cual aplica un paquete de 750 mil millones de pesos para darle liquidez a los mercados bancario y financiero, bajando, además, la tasa de interés a la mayor velocidad posible.

En este año ya bajó cinco veces la tasa de referencia y apenas el jueves pasado la redujo a 5.0 por ciento anual.

Pero, frente a eso, el gobierno federal mantiene una política en contra de la inversión privada, lo que, sumado a la política de contracción de gasto, afectará más a la economía y cerrará las posibilidades de una recuperación pronta.

Es posible que México sea el país con la peor caída económica y con la recuperación más lenta de todo el mundo.

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